miércoles, 28 de enero de 2015

PARA PADRES: SABER ESCUCHAR



Todos pensamos que escuchar es importante, pero, ¿cuántos de nosotros lo hacemos bien?


Keith Davis propuso “10 Reglas de la Buena Escucha”. Son las siguientes: 
  1. Deje de hablar. Usted no puede escuchar si está hablando.
  2. Hacer que el que habla se sienta cómodo. Ayúdelo a sentirse que es libre de hablar.
  3. Demuéstrele que desea escucharlo. Parezca y actúe como si estuviera sinceramente interesado. 
  4. Elimine y evite las distracciones. No se distraiga jugando con pedazos de papel, escribiendo, etc.
  5. Trate de ser empático con el otro. Intente ponerse en su lugar, comprender su punto de vista.
  6. Sea paciente. Dedíquele el tiempo necesario, no interrumpa.
  7. Mantenga la calma y su buen humor. Una persona colérica toma el peor sentido de las palabras.
  8. Evite discusiones y críticas, sea prudente con sus argumentos. 
  9. Haga preguntas. Esto estimula al otro y muestra que usted está escuchándolo. 
  10. Pare de hablar. Esto es lo primero y lo último. Todas las otras reglas dependen de esto. Usted no puede ser un buen escucha mientras esté hablando.

¡Difícil verdad!. Difícil con nuestros amigos, familiares… ¿Y con nuestros hijos?
¿Escuchamos realmente a nuestros hijos?, ¿estamos dispuestos a escuchar a nuestros hijos?
Y, sobre todo, ¿los escuchamos con las premisas de una “buena escucha”?
Todavía queda un largo camino por recorrer, principalmente por que los obstáculos son diversos. Nos cuesta abandonar nuestras creencias tradicionales, que rigen nuestra tarea de padres,  y asumir que nuestros hijos pueden ver las cosas de manera diferente y muy respetable.  Tampoco el ritmo de la sociedad actual nos ofrece el “tempo” adecuado que la práctica que la habilidad necesita. ¿Y escuchar cosas de nuestros hijos, que no resulten de nuestro agrado, controlando las emociones que nos pueden producir?....


Voy a volver a leer estas reglas e intentar reflexionar: si hablo demasiado, si mi hijo se siente cómodo cuando le hablo, si me intento poner en su lugar, si dedico tiempo necesario a escucharle….
Me propongo aplicarlas unos pocos días, dos o tres a lo sumo. ¡A ver lo que siento y cómo se sienten mis hijos!. Ya os contaré.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.